MALVINAS – PATRIOTISMO, PATRIOTERISMO Y ENTREGUISMO APATRIDA





 MALVINAS – PATRIOTISMO, PATRIOTERISMO Y ENTREGUISMO APATRIDA 
 Los cambios producidos y en gestación, en el contexto geopolítico nacional, regional y mundial, son claramente desfavorables para los Intereses Nacionales de Argentina, en todos los ámbitos, y puntualmente en el muy sensible tema de Malvinas. 
 La fuerte y casi totalmente excluyente irrupción del neoliberalismo en nuestro país y la región, no solo nos condiciona muy negativamente (habida cuenta de ser una ideología político – económica clara y brutalmente antinacional, pues promueve la desaparición de los Estados naciones, además del embrutecimiento colectivo mediante sutiles técnicas de manipulación mental y de políticas de vaciamiento de contenidos en la instrucción pública, entre otros factores fuertemente degradantes); sino que instala y reafirma profundos grados de confusiones conceptuales, las que son aceptadas entusiasta e incluso agresivamente, por amplios sectores que se suponen “muy patriotas”, pero que en realidad operan –por lo general sin tener ni pizca de conciencia de ello-, como manipulables marionetas manipuladas por intereses transnacionales. 
 Esos intereses transnacionales actúan para arrancar de cuajo todo vestigio de soberanía y de dignidad nacional en la conciencia de nuestro pueblo, para que se termine instalando la mediocre resignación y la aceptación sumisa del rol de neocolonia dócil al cual se nos está empujando ya desembozada y alevosamente. 
 Sin duda el aniversario del 2 de abril conmueve la fibra patriótica de todo argentino que se precie de tal. El sincero patriotismo así lo siente y lo expresa, sumando el dolor por la derrota de tan catastróficamente conducida guerra, a la bronca que producen las sucesivas acciones de entrega vil de la soberanía en todos los órdenes, que con total desparpajo consuman y profundizan día a día los personeros del neoliberalismo, quienes abierta o solapadamente se mofan de todo principio de sano patriotismo. 
 No solo las acciones de destrucción intencional socio - económica de Argentina, que en todos los órdenes y con total frialdad consuman y profundizan los CEOcratas personeros de las corporaciones y los capitales transnacionales, que echan por tierra todo atisbo de soberanía, pues nos empujan al tristísimo rol de una colonia económica subordinada a los dictados de las Potencias Atlantistas y de la Banca transnacional; sino también en el muy sensible tema de Malvinas, la sucesión de acciones diplomáticas de deplorables características de la Cancillería Argentina y del propio Presidente, evidencian perseguir el impresentable objetivo de resignar definitivamente la soberanía argentina en los tres archipiélagos usurpados por el imperio británico, además de dar indicios elocuentes que la “doctrina macrista” (esa definida en la deplorable frase presidencial de “no entiendo de problemas de soberanía en Argentina”), muestra una serie de acciones que a la par de instalar derrotista resignación en el pueblo, permiten los avances británicos y de la OTAN en el Mar Argentino, la Antártida Argentina, y debilitan nuestra posición soberana en La Patagonia y Tierra Del Fuego. 
 Más aun, tal como lo fundamenté en artículos anteriores, todos los fuertes indicios que sin atenuantes muestran las adrede deplorables acciones del neoliberalismo instalado en el poder y en busca clara de la suma del Poder Público, están perpetrando una versión remozada y acrecentada del siniestro Plan Morgenthau, para debilitar en forma irrecuperable al Estado Argentino, buscando como paso siguiente la balcanización nacional en media docena o más de pequeñas e inviables republiquetas bananeras. Todo lo precedentemente expuesto en forma muy sintética, puede ser ignorado por mucha gente poco informada, o directamente desinformada al estilo de comadres chimenteras que repiten lo que 
escuchan sin analizar nada, e incluso por vastos sectores de la clase media, que por falta de tiempo o por desinterés en informarse fundadamente, no profundizan en sus lecturas. Pero todos estos temas, que tienen profundas connotaciones geopolíticas, deberían ser bien conocidos y mejor estudiados en profundidad, por políticos, académicos, analistas de política internacional, militares, y por ese particular sector de la población definido sociológicamente como los patrioteros de bandera. Son quienes se autodefinen como “muy patriotas”, pero cuyos superficiales patriotismos simbólicos se agotan en la exaltación formalmente fervorosa del himno y la bandera (símbolos importantes sin duda), pero que en temas muy concretos de soberanía terminan apoyando a quienes la entregan en concreto (como en el tema Malvinas, en los últimos dos años), y que no entienden que la soberanía también se defiende con la industrialización, el desarrollo tecnológico, la energía manejada con criterio soberano y estratégico, la salud y la educación pública, el desendeudamiento, la cultura nacional, las acciones de política exterior con criterio geopolítico de Grandeza Nacional, entre otros factores que son despreciados o incluso “ninguneados” por los personeros del neoliberalismo apátrida…!pero nada de eso entienden quienes tienen sus mentes atrofiadas por décadas de colonización cultural perpetrada en grado superlativo, al punto tal que mentalmente siguen atados a prejuicios caducos de los años ’70! Esa atrofia conceptual se ve clara en la vehemente superficialidad con la que –haciendo el juego al accionar británico y de la OTAN-, todo se agota en exaltar “el coraje y el valor de la ‘gesta’ “, pero nada se dice acerca de acciones concretas que no se hicieron, como las profundas correcciones estratégicas metodológicas y operativas que el Informe Rattenbach puntualizó como necesarios, ante los gruesos errores y distorsivos enfoques bélicos cometidos antes y durante la guerra; ni tampoco el entreguista accionar de la política exterior durante el proceso y después de ‘él; de “olvidos” por parte de los “exaltadores de la ‘gesta’ “, de los ruines acuerdos diplomáticos del menemato y seguramente los actuales del macrismo, respecto al tema Malvinas. De hecho, es una incoherencia afirmar como ‘gesta’ un accionar improvisado y culposo perpetrado claramente por las cúpulas cívico - militares proceseras, que nos llevaron a una guerra solo para ser “campeones morales” (pues se priorizó ser “fieles al sistema”, o sea subordinados a las potencias anglosajonas y sus socios menores, desechando priorizar la soberanía aceptando ayudas de quienes fuera), mientras se aceptaba la derrota total, al costo de haberles hecho el juego a los agresores imperiales, y haber destrozado la capacidad operativa de las FFAA, además de los irreparables costos en vidas y en mutilaciones físicas y mentales de muchos combatientes. Completando el cuadro de aberraciones totales a las que se aferran los patrioteros de bandera y algunos otros bien intencionados pero poco informados o directamente muy colonizados mentales, paralelamente hacen exaltación explícita o implícita del neoliberalismo apátrida al cual irracionalmente apoyan, pues no quieren entender que el país subdesarrollado, desindustrializado y socialmente desarticulado al que nos están llevando, carecerá de poder propio con el cual respaldar cualquier política soberana. Respetando profundamente a quienes se jugaron el pellejo, incluso a costa de graves heridas o la pérdida de la vida, y con pleno convencimiento que La Historia y la Geografía demuestran que las Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur pertenecen a Argentina y fueron arrebatadas en típicos actos de piratería geopolítica por Gran Bretaña; es indudable que actos puramente emotivos que soslayan la esencia de la situación y de las profundas rectificaciones diplomáticas, económicas y de Defensa Nacional que deben encararse, a poco o nada conducen y solo terminan haciendo el juego a la sutil diplomacia y al accionar de colonización cultural persistentemente desarrolladas con astucia por Gran Bretaña. El tema no se agota. 

MGTR. CARLOS ANDRES ORTIZ Analista de Temas Económicos y Geopolíticos

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